Hace tiempo que empiezo a estar un poco mosqueado con los gurús.
Por todas partes hay mentores, coaches, guías, expertos o acompañantes que te venden servicios, cursos, sesiones o libros prometiéndote la panacea, una nueva vida o el camino del éxito.
Hasta ahí, todo perfecto. Lo compro y listo. ¡A disfrutar!
Pero no, nada más lejos de la realidad. Y esto es lo que me mosquea. ¿Por qué?
Porque lo que te venden es mentira, no funciona. O, seamos más benevolentes, lo que suele ocurrir es que no te cuentan la letra pequeña, esa donde debería poner que lo más probable es que a ti no te funcione.
Pero todas estas afirmaciones merecen una mayor explicación. Por ello, en este artículo te contaré qué es un gurú y cuál es su gran mentira. Y te contaré también qué hacer cuando te topes con uno.
¿Listo?
¿Qué es un gurú?
Un gurú es, técnicamente, un maestro espiritual inspirado en alguna filosofía oriental. Pero, como habrás deducido, cuando hablo de gurú no me refiero sólo a este tipo de personaje.
El gurú del que hablo es toda aquella persona que es o pretende ser un experto en una materia determinada y que intenta transmitir a otras personas un mensaje, habitualmente de forma pública, con el objetivo de crear cierto impacto en ellas.
Bajo esta definición, hoy en día han florecido muchos tipos de gurú en forma de mentores, coaches, expertos, guías, acompañantes, filósofos, psicólogos y muchas otras denominaciones.
Hoy en día, hay mucho gurú suelto por ahí. Foto vía Shutterstock
Además, muchos de ellos adoptan nombres y términos de lo más curioso e incluso cool (o simplemente inventados por ellos mismos): acompañante espiritual, coach de vida, consejero de emprendedores digitales, guía del despertar, mentor para el cambio, experto en gestión de emociones…
Pero, de momento, todo en orden, pues está bien que haya este tipo de gurú. Muchos de ellos tienen mucho que aportar, muchas fórmulas que dar y muchos ejemplos y anécdotas que ofrecer.
El problema aparece cuando, a través de estos gurús, en lugar de obtener claridad, información y recursos útiles, terminamos confusos, desinformados y sin nada útil en nuestras manos. Y, a veces, con muchos euros menos en el bolsillo.
Es por ello que hoy te habló de los gurús en su sentido más amplio, y de su gran mentira.
¿Cuál es la gran mentira de los gurús?
Como iba diciendo antes, no tengo nada en contra de los gurús. De hecho, seguramente algunos me encasilléis ya como uno de ellos, en el peor sentido de la palabra.
A continuación te cuento la gran mentira de los gurús. Foto vía Shutterstock
El problema del gurú empieza cuando éste “te vende la moto”. Me explico.
Se supone que le gurú te quiere dar algo bueno; algo que va a resolver tus problemas, iluminar tu camino o darte la felicidad. O, simplemente, –seamos más comedidos– te va a ofrecer alguna solución o herramienta útil que te sirva para crecer o facilitarte un poco la vida.
Pues, en muchos casos, eso no es así. Es una gran mentira. Una mentira por omisión, por desinformación o por falta de explicaciones. Y, lo que es peor, en ocasiones se trata de una mentira deliberada y perfectamente adornada con potentes herramientas de marketing que hacen que sueltes la pasta.
Y entonces nos sentimos decepcionados, engañados e incluso enfurecidos con ellos; y con nosotros mismos, por haber caído en la trampa.
¿Por qué no nos funcionan las recetas de los gurús?
Las recetas, consejos o productos que nos ofrecen los gurús no funcionan porque, frecuentemente, lo que hace el gurú es venderte su historia, su camino o la fórmula que le iluminó o le funcionó a él a partir de sus propias necesidades.
Posteriormente, el gurú en cuestión te vende ese camino o fórmula como si fuese el camino de tu salvación o el mejor atajo hacia tu éxito (y el de cualquier otra persona). Y tú te lo crees gracias su brillante oratoria o a una excelente campaña de publicidad.
En definitiva, lo que hace el gurú es proyectar en los demás sus propias necesidades y, posteriormente, venderte sus propias soluciones, aquéllas que le han permitido crecer y tener éxito (o lo que él cree que es el éxito).
¿Quieres algún ejemplo concreto de gurú?
Está el gurú que acaba de despertar espiritualmente, que se siente iluminado y que pretende venderte las herramientas que ha usado para su propia iluminación: yoga, meditación, lectura, escritura…
Está el gurú que cree que la clave de la felicidad es viajar y que te anima a conseguir una vida tan plena como la suya viajando por el mundo. Ese gurú escribe artículos explicando los beneficios de viajar, te da recursos para comprar vuelos baratos, te vende cursos par ganar dinero viajando o crea un curso para que diseñes tu propio blog de viajes.
Está el gurú que ha tenido un éxito económico brutal. Y entonces define lo que es el éxito según criterios monetarios y afirma que sólo fracasa y es pobre el que quiere, vendiéndote, cómo no, la fórmula con la que él ha conseguido ser rico.
La lista es interminable, y apuesto a que conoces ejemplos reales de cada uno de ellos.
El problema y la solución contra los gurús
El problema es simple, eres tú.
El problema de los gurús eres tú…pero…Foto vía Shutterstock
Pero en realidad, tú, además del problema, eres la solución. Te cuento.
El problema es que, tal vez, tú ni deseas despertar espiritualmente ni has venido a este mundo a trabajar desde el alma. Tal vez en esta vida, tu camino hacia la felicidad pase por crear cosas materiales, por pensar de forma racional y por llevar una vida totalmente materialista.
El problema es que, tal vez, tú no estés hecho para viajar. Puede que tu realización personal pase por estar toda la vida en un mismo sitio, creando una familia sólida y dedicándote a criar a tus hijos sin moverte de tu ciudad.
El problema es que, tal vez, tú no necesites tener éxito siendo rico. Tal vez en esta vida, para seguir creciendo, tienes que arruinarte una vez tras otra hasta que logres vivir sin apenas recursos económicos. Tal vez tu trabajo personal en esta existencia requiera dejar de lado el ego y las definiciones clásicas de éxito para aprender a sobrevivir con lo mínimo.
¿Ves por dónde voy?
Yo mismo entro fácilmente en la categoría de gurú, “vendemotos” o pedante, pues he escrito artículos sobre los beneficios del viaje, doy consejos sobre estilo de vida y transmito una filosofía personal muy concreta.
Pero lo que yo nunca voy a hacer es decirte lo que tienes que hacer. Tampoco voy a venderte mi camino como el camino del éxito. Y tampoco te diré que para ser feliz tienes que hacer lo que yo hago, pensar como yo pienso o seguir mis consejos.
¿Qué hacer cuando te topas con un gurú?
Actualmente, cuando me topo con según qué gurú, siento cierta alergia y salgo corriendo, pues mi pequeña antena es cada vez más sensible e intolerante ante pedantes, “vendemotos” y falsos iluminados.
Esta es una opción razonable cuando te topas con un gurú. Foto vía Shutterstock
Pero mi reacción depende de lo que me transmita cada persona. Y ello depende de cómo conecte con ella, de mi estado actual y de mis necesidades del momento.
Así pues, no hay una respuesta única para todo el mundo. No obstante, si tuviera que darte algunos consejos al respecto, te diría lo siguiente:
- Ignora a los que quieren convencerte de alguna idea, estilo de vida o forma de actuar concreta de forma insistente.
- Huye de aquellos que piensan que su camino es el que hay que seguir o que pretenden venderte su fórmula de éxito como si fuera la única o la mejor.
- Aléjate de las personas que te generan desconfianza, angustia, rechazo u otras sensaciones desagradables. O no son para ti, o no es el momento adecuado para que recibas su mensaje.
- En definitiva, sé crítico con lo que lees y escuchas –siempre– y, si no resuena contigo al cien por cien, mira para otro lado y sigue con lo tuyo.
Teniendo esto en mente añadiría que, cuando te topes con un gurú, escuches lo que tenga que decir, si te apetece. Puede que su mensaje conecte contigo y te cambie la vida. O puede que sea un “vendehumo” que no te aporte nada útil de verdad.
Esto último es lo más habitual, pues a lo largo de la vida –al igual que con las parejas– hay pocas personas que nos acaben llenando de verdad. Y éstas suelen aparecer en el momento y el lugar adecuado; a veces de forma inesperada.
¿Quién es tu verdadero gurú?
Descubre quién es tu verdadero gurú. Foto vía Shutterstock
Cualquiera puede ser tu gurú o maestro, y no sólo los iluminados que corren por ahí tratando de marcar tu camino hacia la felicidad.
Un gurú o maestro puede ser un amigo, una conversación imprevista con un niño, una noticia en la televisión, o una idea que pase por tu mente de repente.
Pero, en general:
- Sólo te sirven aquellos gurús cuyo camino sea afín al tuyo.
- Sólo te sirven los gurús cuyo mensaje y verdades armonicen con la tuya.
- Sólo te sirven los gurús cuya forma de ver el mundo coincida con la tuya.
- Sólo te sirven los gurús cuyas necesidades sean similares a las tuyas.
- Sólo te sirven los gurús cuyo camino y destino tenga algo que ver con el tuyo.
- Sólo te sirven los gurús que de verdad conecten contigo.
Por tanto, en el fondo, sólo hay un único gurú, tú mismo. Por ese motivo, para mí, el mejor camino para crecer es esforzarse por conocerse uno mismo, escuchar tu alma e intentar identificar tus virtudes, defectos y necesidades.
Tú no necesitas seguir a nadie, ni que nadie te diga lo que tienes que hacer. Sólo existe un camino válido, el tuyo propio. Y sólo existe una respuesta válida, tu propia respuesta.
En realidad, todos tenemos dentro de nosotros mismos todas las respuestas que buscamos, y todos somos gurús, nuestro propio gurú.
Esta es mi verdad y, como debería decir un buen gurú, ahora tú debes decidir si también es la tuya.
#####
Y tú ¿qué opinas al respecto?
¿Estás cansado de gurús, expertos e iluminados? ¿O bien has encontrado verdaderos mentores y maestros que te acompañan en el camino?
¿Cuáles son las características que, para ti, debe tener un verdadero gurú?
No dudes en dejar tu opinión en los comentarios, justo aquí abajo. Siempre es un placer leer las opiniones de otros lectores.
P.D. Foto de portada vía Shutterstock
Felicidades por el artículo Ubay!
Hacía un tiempo q no pasaba por aquí y me ha encantado volver a leerte.
Estoy de acuerdo contigo en prácticamente todo.
Yo también me he cansado un poco de tanto gurú y lo q más busco ahora es conectar conmigo misma. Ahí está la verdad!
Justo hoy escuchaba a Enric Corbera decir algo así como: “Las personas q quieren ayudar actúan desde el miedo. Si de verdad quieres ayudar, eleva tu nivel de conciencia y lo demás sucederá solo”.
Y en esas estamos…
Pero aunque mi nivel de conciencia alcanzase límites estratosféricos, seguiría siendo mi camino, y este no puede servirle a todo el mundo.
Y menos mal!
Gracias por recordarme lo q he venido a hacer aquí💛
Tania
Hola Tania…
El placer es mío por tener una visita tuya…
Me alegro que compartamos la forma de ver las cosas.
Aunque esté bien que haya gurús, hay que saber diferenciar a los auténticos de los vendemotos, y, como digo en el artículo, cada uno debe buscar su propio gurú, de la misma forma que buscamos a una pareja (no todo el mundo nos sirve, nos sabe guiar, nos complementa…).
Además, en el fondo, todos disponemos en nosotros de todos los recursos que necesitamos para seguir creciendo. Sólo necesitamos, a veces, un empujoncito…No consumir productos, recetas ni ideologías sin control hasta el punto volvernos adictos o dependientes y gastarnos más dinero de la cuenta.
En fin, todo eso ya lo sabes, así que…espero que sigas creciendo, que sigas haciendo tu buena labor con rigurosidad y pasión y…
¡Hasta la próxima!
¡Un abrazo!
Hola, me pareció muy interesante lo que escribiste, me hizo pensar las cosas de una manera diferente, yo por ejemplo hago yoga, meditación y todo lo relacionado y me encanta, es lo q más me hace sentir en contacto conmigo misma, y me llamaba mucho la atención un gurú de india ( Osho ) leí varios de sus libros y lo admiraba pero algunas cosas que decía o proponía se me hacían difíciles de seguir, y eso me frustraba un poco, pero esto que dijiste que somos nuestros propios gurús es muy cierto, quizás simplemente algunas cosas no son para mí o no sea el momento, así que estoy de acuerdo con lo que escribiste.
Hola Adriana…
Me alegra haberte aportado algo positivo con el artículo. Y está bien que practiques todas esas disciplinas. Mientras las necesites para crecer, evolucionar y te sientas bien haciéndolo, adelante.
Creo que Osho había también dicho alguna vez esa frase de «Sé tu propio gurú». No obstante, Osho fue un gurú de doble filo. Por una parte, inspiró y acuñó muchas ideas y conceptos útiles para el crecimiento de las personas. Por la otra, ejerció su influencia a nivel colectivo para obtener muchos beneficios económicos, a veces de formas poco ortodoxas, por decirlo de una manera. Si buscas por internet, encontrarás detalles que te darán qué pensar.
Gracias por hacer referencia a este autor, pues es un ejemplo perfecto para este artículo.
¡Un abrazo!
Holaaa! Cómo están?
Es verdad, Varias citas he leído en libros de Osho que sinceramente a mi no me servirían para «despertar». Por ejemplo, será mi forma de crianza, mis valores, puedo estar equivocada. No me cabe en el corazón, ni en la mente que uno de los cónyuges por amar a quien tiene al lado pueda amar también a otra mujer y acostarse con ella si sólo es amor. Y quien sea el cónyuge enamorado, y amando está a su compañera por eso puede y quiere hacerlo con quien a su gusto desee (sea el hombre o mujer). Eso no me simpatiza… Será que el Poliamor, para mi gusto, es una forma de libertad para quienes deciden hacerlo; no para quienes quieren crecer en la vida; es decir no existe sólo ese camino para ser feliz.. Ese no sería un camino obligado para ser un iluminado. Qué opinas Ubay? Puede que esté siendo «cerrada en mis pensamientos» ?
Hola Marian…
Precisamente Osho también decía que cada uno es su propio gurú, así que, ya sabes qué diría si no comulgaras con sus ideas: «Encuentra las tuyas propias». Sin embargo, tal y como comenté, Osho también estuvo implicado en multitud de conflictos en Estados Unidos, y es bien conocido que tenía intereses económicos muy acentuados que, al parecer, no eran incompatibles con su espiritualidad.
Hoy en día, cada vez hay más libertad sexual y en las relaciones sentimentales. Hay tantos nuevos conceptos (pansexual, demisexual, metrosexual…) que a veces no sé ni qué significan. Esa variedad no tiene por qué necesariamente mala, pues son vías que permiten que cada persona pueda encontrar más fácilmente aquello que realmente vibra en el fondo de sí. Da igual lo que seas o cómo te definas (si quieres definirte), siempre que aquello esté alineado contigo y no atente contra la libertad de los demás. Yo, soy más clásico en ese sentido, pero entiendo y acepto cualquier orientación. Como dices, existen muchos caminos para ser feliz.
En fin, eres como eres…y está bien. Y los demás son como son, y no creo que tenga argumentos para decir que lo de los otros no esté bien.
¡Un fuerte abrazo!
Hola Ubay,
Me ha gustado mucho tu artículo,
La verdad, que hoy por hoy, hay mucha
Mala intención, en muchos aspectos, de esta vida, intentan hacer negocio, sacar dinero, como sea, a costa de las personas más débiles, sin ver la mala intención, es una pena,,,,,
Ya, que las personas, que actúan de buena fe, se les perjudica,,,,
Es complicado, decir, cuando una persona sufre mucho, Hará, se fiara, con los ojos cerrados, con tal de que Le quiten ese dolor, esa angustia, ese sin vivir,,,,,
De lo que se trata, es trabajarse uno_a, mism@,Siempre con ayuda profesional,
Un psicólogo, un terapeuta, Personas aptas para ello,,,,,
Es complicado,,,, Y difícil,,,
Pero, nada es imposible,,,, Con buena voluntad, intención, Salir de la zona de confort y enfrentarse a esos miedos, temores, de un@midm@,
Sabiendo, que siempre estamos de paso en esta vida, nunca estaremos por siempre con este cuerpo, pero, si, con nuestra alma, todo lo bueno que hagamos, eso es lo que nos llevaremos, nada más,,,,,
Más o menos, Mi opinión muy personal
Mis mejores deseos para ti y tu vida,
Un gran abrazo, Ubay
Hola Toñi.
Celebro que te haya gustado el post.
Sí, está claro que hay muchas personas que se aprovechan de la debilidad, de la necesidad ajena para aprovecharse de los demás. No digo para sacar dinero, porque si algo te funciona, está bien pagar por ello, y pagar lo que vale. El problema es cuando pagas y no obtienes nada a cambio. Así pues, hay que informarse antes (preguntar, mirar la letra pequeña, pedir referencia…) ir con pies de plomo y desconfiar de personas que dicen tener la solución definitiva a tus problemas. Especialmente si, como percibo, te refieres a profesionales o no profesionales que se encargan de, por ejemplo, la salud.
Y, por supuesto, lo importante es trabajarse uno mismo a todos los niveles y, si necesitas ayuda, acudir siempre a personas tituladas, profesionales y con referencias sólidas.
Muchas gracias por dejarnos tu opinión y tus impresiones .
Un abrazo Toñi
Interesante artículo.
yo, de primeras, desconfío de cualquiera que diga «que te va sanar» o, como dices, que te diga lo que tienes que hacer. Creo que, cada uno debemos seguir nuestro propio camino. Y que, aunque haya personas que te puedan dar un empujoncito (yo he tenido la suerte de encontrarme algunas) y te puedan servir de «guía», al final es el uno mismo el que va haciendo su camino.
Sin ya entrar en la mala intención de algunos, es cierto que muchos (creo que todos lo llegamos a hacer en algún momento) intentan ayudar con la mejor intención, transmitiendo lo que a ellos les ha ayudado, como si fuera un receta «mágica». Pero, como dices, no todos somos iguales, ni necesitamos lo mismo ni necesitamos o queremos seguir el mismo camino. En el libro «la sabiduría del Eneagrama», al principio (hablando de los libros de autoayuda) explica por qué estos, rara vez, son de utilidad. Y la explicación que da es precisamente esa que tú comentabas… que cada uno somos distintos. Y lo que a uno le ha ayudado a otro le puede, incluso, perjudicar o, cuando menos, no servir de nada.
Hola Amaya…
Efectivamente, a pesar de que soy muy confiado en general, con el tiempo he aprendido a desconfiar. De hecho, creo que todos hemos aprendido a desconfiar por nuestro bien. Especialmente de aquellos que prometen demasiado. Y, como bien comentas, al final, cada uno debe encontrar sus propias respuestas (ser su propio gurú).
Y sí, todos hemos ayudado a alguien de alguna forma en algún momento de nuestra vida, precisamente porque estábamos con la persona adecuada en el lugar y el instante adecuado. Y ahí subyace la esencia del artículo: todos somos nuestro gurú, todos podemos ser el gurú de otro, pero sólo conectando con esa otra persona de forma profunda con lo más genuino de su ser. Y eso no podemos pretender hacerlo con todo el mundo.
Gracias Amaya por tu aportación
¡Un abrazo!
El artículo me ha parecido interesante y acertado.
Leí en un libro, creo que en “El antídoto” de Oliver Burkeman, que muchos best-sellers de autoayuda analizan casos de éxito para encontrar patrones, y exponen esos patrones como “patrones de éxito”, pero no se paran a analizar a los que han fracasado para darse cuenta que esos “patrones de éxito” también están entre los menos afortunados, a quienes esos patrones no les han funcionado.
Creo que este concepto puede encajar en la línea del artículo.
“El antídoto” quizás es un libro interesante porque, aunque no dé ninguna panacea, realiza una crítica contra el pensamiento positivo y el optimismo, aportando datos de múltiples experimentos al respecto; y explora un camino más estoico hacia la felicidad.
Saludos!
Hola Oliver…
Me alegro que te haya gustado el artículo, y te agradezco tu comentario. No conocía este libro que comentas, así que, creo que será una buena opción para mi próxima lectura.
Como bien dices, muchos gurús se centran en el lado bueno de su visión o sus teoría, y siempre es bueno tener en cuenta la otra parte, ser crítico y saber que no todo lo que reluce es oro.
Te agradezco tu aportación, estoy seguro de que va a ser de utilidad para los lectores.
Un fuerte abrazo
Hola Ubay muy buen articulo felicidades
Hola María Teresa…
Celebro que te haya gustado el post. Espero que te sea de utilidad a la hora de lidiar con los abundantes gurús con los que te vayas topando a lo largo del camino.
Un saludo.
Hola Ubay,
Me ha parecido muy interesante el post.
Cada uno debe seguir su propio camino, sus metas y pensamientos… y efectivamente, lo que les puede ser útil a unos, a otros no o incluso todo lo contrarío. Yo soy de la opinión que todo el mundo siempre puede enseñarte algo, pero cada uno debe coger para sí, lo que piense que le puede ser útil para su propia evolución, no todo es válido.
No pienso que muchos de los gurús «vendemotos» como los has denominado, lo hagan con mala fe. Simplemente creo, que su afán y sus intereses por lucrarse a veces están por encima de lo ético.
Como te comenté, di por casualidad con tu blog y he de decirte, que hace prácticamente un par de semanas, desconocía el mundo de los blogs… ya que no soy muy pro redes sociales, si no es con una finalidad. Si es cierto, que había oído hablar de la bloggera tal o cual… pero todas relacionadas con el mundo de la moda que es a las que más cobertura se les suele dar en televisión.
Pero a pesar de mi corta andadura en este mundillo (no voy a negarte que ya me pica la curiosidad por saber más) me he encontrado con varios gurús de este tipo, así que creo que hay que tener los ojos bien abiertos para saber diferenciarlos. Aunque se pueden aprender algunas cosas de ellos, nadie debe marcarte unas directrices a seguir.
¡Un abrazo!
Sonia T.
Hola Sonia…
Me alegro que te gustase el post.
Efectivamente, concuerdo contigo en que de todo el mundo puede enseñarse algo. Pero también es cierto que a veces hay enseñanzas que pueden doler o perjudicarte más de lo necesario, con lo que hay que ir con cuidado.
Y espero que tengas razón cuando dice que los gurús, en el fondo, no tienen malas intenciones. Pero ya sabes que en este mundo hay de todo.
Y nada, bienvenido al mundo de los blogs; que, como ya ves o ya verás, es casi infinito. Encontrarás cosas maravillosas, otras horribles, y, por supuesto, mucho gurú suelto, así que aprende lo que puedas, pero ten cuidado 😉
¡Un fuerte abrazo!
Hola Ubay,
acabo de googlear : “los gurús de hoy en día” y me topé con tu articulo que me llamó la atención, lo hice porque hace rato tuve una conversación muy profunda sobre este tema con un buen amigo, al que siempre le “venden la moto” y acudió en varias ocasiones a este tipo de “talleres” “conferencias” de estos “gurués” “coaches “ o cómo quieran llamarse, siempre he sido bastante crítica con esta “gentuza” (a veces incluso he intentado moderarme al criticarles e intento “abrir” mi mente desde otra perspectiva para entender el beneficio que supuestamente aportan a otras personas y te digo que igual que tú dices “mi cuerpo los repele” no sé, es como que mi cerebro forma una especie de cortocircuito y no logra ver nada positivo de este tipo de eventos/cursos/talleres/ en seguida detecto lo que tú muy bien explicas en este articulo. Te felicito y me alegra saber que hay personas que opinan igual. “Las cosas no son como son, sino como somos” (Jiddhu Krishnamurti) para mi ese hombre si es mi gurú, recomiendo cualquier libro o entrevista de el.
Saludos,
Sara
Hola Sara,
Me alegro que mi visión haya vibrado con aquello que te suscitan algunos de estos nuevos «gurús». Por supuesto que los hay buenos; es decir, aquéllos que vibran a tu misma frecuencia de onda. Pero, si eres sensible, te das cuenta que no es el caso con la mayoría, y también de das cuenta que muchos de ellos tienen intenciones desleales y motivaciones muy terrenales ocultas en una aura de filantropía y amor desinteresado que es completamente falsa.
Por tanto, viendo que tienes una antena que te permite localizarlos, creo que no vas a tener ningún problema. Es lo mismo que detectar amistades peligrosas o parejas tóxicas, símplemente sales corriendo y fuera. Y si puedes hacer algo para que otras personas no caigan en sus garras, aún mejor.
En fin, espero que encuentres tu propio gurú interno y que, si encuentras a alguno ahí fuera que valga la pena, sepas detectarlo y crecer al máximo gracias a su ayuda.
Un fuerte abrazo.
¡Hola Ubay!
Sé que este artículo ya tiene su tiempo de publicación y estoy atrasado en leerlo.
¡2 noticias! 1 buena y la otra también, -jaja-.
1.- Desde ya te sigo, por el simple hecho de atreverte a lo que otros no le quieren poner nombre, concepto y descripción a las cosas, por ejemplo: «No es tu tiempo», «Te falta mucho por crecer espiritualmente», «Todo a su debido tiempo», «No es tu propósito de vida», y párale de contar, siendo que podría uno pensar, -Y sí yo ni siquiera tengo un propósito, y si este es mi tiempo porque ver otros tiempos que no quiero o pido, y si no tengo la necesidad, ni obligación de crecer espiritualmente porque a eso no vine, etc.-. Seríamos como una empresa donde varios profesionistas (empleados/trabajadores/colaboradores) pasaran a querer ser todos al mismo tiempo y cuasiobligados por la sugestionabilidad de los empleados sin omisión a querer ser Director CEO de la empresa, siendo que la misma necesita de ingenieros, contadores, comunicólogos, administradores, consejo directivo, entre otros. Entonces, ¿Por qué todos debemos crecer espiritualmente y no material, sexual, animal o universalmente?. Tu mismo has redactado ya en tu artículo.
2.- Sincerarte en que el ser gurú no es el problema (tú mismo te consideras). El problema es que se sobrepase el límite de la influencia para manipular o convencer a terceros y venderles una fórmula mágica, claro, después de que ellos a través de sugestionarte con que algo en tu vida está mal o mediante conceptos, leyes, normas, creencias espirituales que antepasados «iluminados» predicaban de manera sincera -pero- desde y para su propia experiencia, te hacen creer que debes seguir y manipulando su interpretación, que para cada quién debería significar de manera diferente, un ejemplo sería: «Las 7 leyes espirituales» y muchas más, que se han tergiversado y le dieron otra intencionalidad fuera de su origen.
Enhorabuena, espero que sigas aportando más sobre el tema, sin descarrilar ahora a temas de gurú mágico trona dedos, y mira que si creo y considero que si existe la magia, pero la que se usaba en la antigüedad.
¡Saludos!
Hola Adrián,
Disculpa mi tardanza en responderte, pero es que estoy 100% de acuerdo con lo que dices, con lo que tengo poco que decirte al respecto.
Bueno, tal vez sí: en breve escribiré un nuevo artículo muy relacionado con este tema que estoy seguro que va a gustarte 😉
¡Un abrazo!
Muchas gracias por un artículo tan bien escrito y explicado. Un gran saludo desde Mérida, yucatán, México.
Saludos de vuelta desde España.
Me alegro que el artículo fuera de tu gusto.
Un abrazo
Estimado Ubay,
El artículo tiene su buena intención, pero como sacerdote hindú (purohita) presidente de la Federación Hindú de España y Vicepresidente del Hindu Forum of Europe, me sabe mal que que utilices la palabra guru (no lleva acento en sánscrito) y podias decir maestro, maestra, profesor, profesora. El artículo está ilustrado con cantidad de imagenes que hacen referencias al hinduismo (forma de espiritualidad más antigua de la humanidad y que sigue vigente y con mil millones de seguidores) como si fuera algo malo, negativo, el yoga ¿no hay otras terapias donde te pueden engañar?.
Engañadores hay muchisimos, de hecho estamos viviendo en la epoca de Kali-yuga, donde se trata de engañar a la gente desde la pseudo espiritualidad. Pero tratar de culpar a toda una tradición espiritual me parece que no es lo correcto.
Al final cualquier persona que da un consejo, que enseña una materia es un-una guru, otra cosa es que esa persona demande una adoración personal o que trate de controlar la vida del alumno o discipulo.
Existen maestros y disciplinas en todas las tradiciones y culturas, ¿ por que siempre señalizar a la espiritualidad hindú?
Usted mismo a través de su paginas, escritos, videos también trata de demostrar que su metodo es el mejor o el que le va bien, usted también aunque no lo diga, es un guru un maestro.
Un saludo cordial
Buenas tardes Juan Carlos.
Un placer y un honor tener el feedback de un verdadero guru hinduista.
En general, concuerdo con tu comentario. No obstante, utilizo la palabra gurú en su sentido más amplio que, como define la RAE, es: «quien se reconoce como maestro o guía en un ámbito determinado». Y, dicho sea de paso, el artículo sólo contiene una imagen de un guru hinduista; y ello no es porque me refiera en especial a esta rama del Hinduismo, sino por un tema meramente estético y arquetípico. Como bien indicas, la palabra guru procede del Hindi, así que es casi obligatorio incluir alguna imagen que haga referencia a ello.
Y, por último, completamente de acuerdo con tu última conclusión, que es la que intento que la gente entienda. Y es que, en el fondo, todos somos gurús. Y la única verdad que debemos buscar y a la que, en último término, debemos rendir cuentas, es la propia. Si ello estuviese más claro, podríamos disfrutar de la verdad de todos, y evitar los engaños de los falsos gurús embaucadores que, como comentas, abundan en estos tiempos de Kali-yuga.
Un fuerte abrazo y muchas gracias por tu comentario.